En nuestra sociedad, hablar de la muerte
es casi un tema tabú. Se suele considerar morboso y es raro que alguien hable
sobre ella; nos resulta muy difícil asumir que la vida tiene fin y ver la
muerte como “un acontecimiento más” en el proceso de la vida, formando hasta
cierto punto parte de ella y cerrándola.
Es por esto que la comunicación de la
enfermedad es uno de los problemas que afectan tanto al paciente como a la
familia.
El momento de comunicar a una persona un
diagnóstico fatal es una difícil situación. No hay una forma única de hacerlo,
y el profesional debe tener siempre presente los derechos del enfermo y
respetarlos, y saber individualizar en cada caso. El paciente tiene derecho a
saber la verdad, pero en ocasiones también a no saberla.
La empatía consiste en ponerse en el
lugar del que sufre para buscar su mayor confort físico, mental y espiritual y
es la base de un buen cuidado paliativo. Incluye la simpatía que favorece el
diálogo y una relación de confianza, en muchas ocasiones los familiares se
cansan de la situación y no le presentan el acompañamiento que necesita el
paciente haciendo mas difícil enfrentar la enfermedad por la falta de empatía
de sus seres queridos.
La Dra. Giorjanela Lopez indica que los principales problemas para los familiares son:
- Tener poca educación sobre el tema.
- Cansancio emocional y físico del esfuerzo al cuidar al adulto mayor.
- Pocos recursos económicos para hacerle frente a la situación.
- Angustia.
- Poca ayuda por parte de otros familiares.
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